Montanera en la Dehesa de Huelva: origen del jamón ibérico

by carlos on 24 noviembre, 2025 Sin comentarios

Con la llegada del otoño, la montanera en la  dehesa de Huelva marca el inicio de uno de los momentos más esperados del año: el periodo en el que el cerdo ibérico se alimenta libremente para dar origen al auténtico Jamón Ibérico de Bellota Gran Paladar. Este ciclo, que se extiende de octubre a febrero, es clave para la calidad y el sabor único de nuestro producto.

¿Qué es la montanera y por qué es única?

La montanera en la Dehesa de Huelva es mucho más que una fase de alimentación: es una tradición centenaria que conecta naturaleza y gastronomía. Durante estos meses, los cerdos ibéricos disfrutan de una dieta natural basada en bellotas, complementada con hierbas, raíces y setas. Cada animal consume 10-12 kg de bellotas al día, más 3-5 kg de vegetación, y bebe más de 50 litros de agua diarios. Para encontrar las mejores bellotas, recorren hasta 10 km diarios, lo que favorece la infiltración de grasa y el sabor inconfundible del jamón.

El arte de elegir la bellota

El cerdo ibérico no come cualquier bellota. Gracias a su fino olfato, distingue las más dulces del quejigo frente a las más amargas del alcornoque. Incluso pelan las bellotas y desechan la cáscara antes de comerlas. Este comportamiento selectivo es parte del secreto que convierte la montanera en una experiencia única y en el origen de un producto gourmet.

De 90 a 180 kg: la magia del ácido oleico

Durante la montanera, el cerdo entra con unos 90 kg y sale con 150-180 kg, engordando de forma natural gracias a la bellota, rica en ácido oleico, el mismo componente saludable que encontramos en el aceite de oliva. Este proceso garantiza un jamón con propiedades beneficiosas para la salud y un sabor incomparable.

Sostenibilidad y equilibrio en la Dehesa

La montanera no solo es tradición, también es sostenibilidad. Cada cerdo necesita aproximadamente una hectárea de dehesa, lo que ayuda a mantener el equilibrio del ecosistema, evita la proliferación de matorrales y favorece la regeneración del bosque mediterráneo. Cada encina produce entre 9 y 12 kg de bellotas al año, aunque hay ejemplares que superan los 400 kg, y una buena dehesa alcanza unos 400 kg por hectárea.

Este sistema es un ejemplo perfecto de simbiosis entre naturaleza y tradición, donde la ganadería extensiva contribuye a la conservación del medio ambiente.

Un legado que se saborea

La montanera es el origen del Jamón Ibérico de Bellota Gran Paladar, un producto que refleja el respeto por la naturaleza, la excelencia gastronómica y la pasión por la tradición. Cada loncha cuenta una historia de libertad, sostenibilidad y calidad.

Montanera en la Dehesa de Huelva: origen del jamón ibérico